“TIEMPO Y ESPACIO, ELEMENTOS FUNDAMENTALES PARA EL ESTUDIO DE LA HISTORIA”
El desarrollo personal o la
historicidad de lo pueblos es un proceso, tiene que ver con la sucesión de
eventos, etapas o hechos que pasan en un momento, en un lugar, contextos temporales y espaciales que
permiten comprender los hechos históricos.
El tiempo y el espacio son dos
elementos fundamentales para el estudio de la historia, desde el evento más
simple hasta el suceso de mayor impacto nacional, ocurre en un tiempo (su
ubicación temporal) se sitúa en un momento, período o época; con esa referencia
es posible relacionarlo con otros eventos en lugares diferentes. El otro
elemento es el espacio, es decir, el contexto físico-geográfico donde acontece
el evento, permite su ubicación espacial misma que facilita su localización
(localidad, municipio, estado, nación, continente). En este último elemento, la
geografía es importante, pues se pueden relacionar eventos, establecer causas
efecto o fenómenos que repercuten en la colectividad (llámese grupos de
población, culturas o regiones
delimitadas a veces por límites físicos, lengua, cultura o división política).
El estudio de la historia provee
conocimientos, te aproxima a lugares y a períodos, son referentes que propician
la reconstrucción de los sucesos, a ubicar en la línea del tiempo o a través de
cuadros comparativos, los sucesos simultáneos o particulares según el contexto
físico. Ambas formas permiten recrear museos vivientes, fuentes o testimonios
para identificar lo que cambia y lo que no cambia.
Considero importante para la
práctica docente y el estudio de la historia, el tiempo y el espacio porque son
dos elementos referenciales que posibilitan la relación espacio-temporal, la
cronología, el establecimiento de relaciones causales entre sucesos y cómo
éstos influyen en el presente y futuro. Cuando se toman en cuenta ambos
aspectos, los alumnos activan sus procesos mentales (análisis, síntesis,
razonamiento, memoria) y las habilidades del pensamiento (observación,
comparación, relación, clasificación y descripción).
El estudio de la historia no
está limitado a la memorización sino al descubrimiento y comprensión de
sucesos, interpretar hechos, ubicándolos en un momento, en un espacio, para
asignarle significación a una situación o hecho histórico. El pasado se
conserva en fuentes y testimonios, reconstruir esos pasajes es una formar de
reconstruir el conocimiento. El aprendizaje de la historia resulta
significativo cuando se activan procesos cognitivos, de comunicación y
socialización.
CURSO
METODOLOGÍA PARA EL APRENDEZAJE DE LA HISTORIA II. EDUARDO MANUEL DURÁN VELA.